Adriana Testa: Síntoma y pulsión
Por Pablo Rosas
El viernes 3 Julio en la sede de
Apsat tuvimos la visita de Adriana Testa, miembro y ex presidenta de la Escuela
de Orientación Lacaniana, miembro de la Asociación Mundial de Psicoanálisis
(AMP) y de la Fundación Descartes.
La clase se tituló “Síntoma y
Pulsión”, centrando esta conjunción en el campo de la experiencia de lo real en
la cura psicoanalítica, pasando del significante como pacto a la opacidad
irreductible en la relación del sujeto con lalengua. Existe una articulación,
puntualizó Testa, entre concepto y experiencia, siendo los conceptos quienes
permiten dar cuenta de la lógica de la experiencia, la del uno por uno, tal
cual Freud lo indicara. Sin embargo, para Jacques Lacan, la experiencia es
encarnada y animada, lo cual deja siempre una hiancia entre ambos términos.
El optimismo lacaniano de los
años 50 queda parcialmente explicado por las influencias culturales de la época
(la obra de Hegel), el símbolo mataría a la cosa (sobre lo que nombra) siendo
un factor de mediación. Tal optimismo consistía en la creencia que lo simbólico
incluso incidiría en lo real, que lo “obedecería” en cierto modo.
A medida que Lacan diferencia lo
libidinal de lo imaginario es donde la pulsión encuentra su lugar en lo Real.
Separa el goce de lo imaginario evidenciando otra dificultad, el A (simbólico)
y el a (imaginario) no bastan como referencia, resultan insuficientes.
Es precisamente en el Seminario
XI donde Lacan separa el inconsciente freudiano del suyo, un inconsciente
discontinuo que se manifiesta en las alternancias, un agujero donde se producen
hallazgos. Si lo Real es lo que retorna siempre al mismo lugar es en tanto hay
un tiempo Simbólico, el de las cadenas significantes, donde las cosas retornan.
La repetición, lo traumático, la tyche, dan
cuenta de aquello que no cesa de no escribirse, satisfacción paradojal siempre
en exceso, ligada a la trayectoria de la pulsión.
Marcelo Izaguirre: Del lenguaje a
la pulsión
Por Virginia Gilardi
El viernes 11 de septiembre
Marcelo Izaguirre, miembro de la Fundación Descartes, autor de “Jacques Lacan:
el anclaje de su enseñanza en la Argentina” estuvo en la sede de ApSAT para dar
la clase: “Del lenguaje a la pulsión” en el marco del seminario sobre Los
cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis. De la estructura del lenguaje
al montaje de la pulsión, sería el título ampliado de la propuesta que mantuvo
en su transcurrir la idea de que en este pasaje lejos se estaría de querer
arribar a alguna síntesis posible en lo que a las pulsiones y a una vida sexual
adulta se refiere.
Propuso abordar el tema a partir
de tres puntos:
-Diferenciar la transferencia de
la repetición, basando esta diferencia en un cambio en la concepción de la
causa como causas excepcionales: el automaton, traducido como azar y que tendrá
que ver con fenómenos excepcionales de la naturaleza y la tyche, fenómenos
excepcionales también pero en los que interviene cierta elección del sujeto o
intencionalidad.
-El inconsciente y su relación con la
sexualidad, por lo cual se introduce la realidad del inconsciente como realidad
sexual, puesta en acto en la transferencia que pone en juego un límite a la
interpretación. La sexualidad es este límite, lo que se introduce en el
intervalo entre el síntoma y la interpretación.
-Diferenciación entre la pulsión
y el amor, a partir del dualismo pulsional freudiano: pulsiones sexuales y
pulsiones de autoconservación, satisfacción pulsional anterior a la
constitución del yo y en consecuencia ligada al amor.
Lejos de pasar de las pulsiones
parciales al objeto total, le basta su recorrido para hacer surgir de él, un
nuevo sujeto más allá de las determinaciones significantes y a partir de un
montaje. Sometido así a las determinaciones pulsionales.
Graciela Musachi: El anzuelo de
la mentira
Por Pamela Morelli
El 9 de octubre del 2015 nos
visitó Graciela Musachi* en el marco del curso anual “Los cuatro conceptos
fundamentales del psicoanálisis” de J. Lacan. La clase se tituló “El anzuelo de
la mentira”.
Con un estilo propio que conjugó
claridad y rigurosidad, Musachi se sirvió de una cita de W. Shakespeare - “Con
el anzuelo de la mentira pescarás la carpa de la verdad”- y una ópera de Mozart
(Cosí Fan Tutte o Así hacen todas) para revelar la verdad en el engaño del
amor.
Desde éste punto preciso partió
partió Freud en 1895 en Estudios sobre la histeria: La única verdad en juego en
el amor, es el engaño. Es un error, una “falsa conexión” en términos freudianos
o un “falso anudamiento” en palabras de E. Laurent.
Considerando que en la obra de
Freud siempre está presente una lógica binaria, se hizo un desarrollo detallado
de la transferencia que, como instrumento, presenta dos aspectos: Operando como
obstáculo, pero también como resorte del análisis ya que es lo que posibilita
“arrojarse a los brazos del analista” produciendo así el desencadenamiento de
la palabra, siendo por amor que se empieza a hablar. Allí radica la virtud de
la transferencia: es sólo a través de la misma que es posible la apertura del
inconsciente. Tomando este camino declaró: “Todo lo que hacemos en el
dispositivo analítico es hablar del amor. El amor por el otro, el confesado, el
inconfesado. En este punto el desafío del analista es resistir la prueba y no
dejarse engañar.”
Con una intertextualidad
masottiana,recorriendo textos de Freud, Lacan, Miller, Laurent, obras de la
literatura y la música la invitada transmitió que no hay un saber absoluto o
una verdad establecida por un solo autor, sino que hay distintos modos de
lectura.
La clase se desarrolló en un
clima ameno y fue seguida de un interesante debate.
*G. Musachi es analista miembro
de la AMP, la EOL (de la cual ha sidopresidente) y de la Fundación Descartes.
Autora de Mujeres en movimiento, El otro cuerpo del amor y Fantasmas
colectivos, entre otras publicaciones.
Elena Levy Yeyati: Despertar para
seguir durmiendo: El fracaso del sueño y la repetición
Por Natalia Senestrari
El pasado viernes 16 de octubre
de 2015 contamos con la presencia Elena Levy Yeyati, miembro de la Fundación
Descartes, de la Escuela de Orientación Lacaniana y de la Asociación Mundial de
Psicoanálisis. También autora y compiladora, respectivamente, de los libros “El
DSM en cuestión” y “La casuística de Lacan.”
En el marco de nuestro Seminario
Anual de Lectura del Seminario XI de Lacan: “Los cuatro conceptos fundamentales
del psicoanálisis”. Elena dio una clase en la sede de la APSaT, titulada
“Despertar para seguir durmiendo. El fracaso del sueño y la repetición”. La
misma tomaría como ejes dos capítulos de dicho Seminario: el Capítulo IV: De la
red de significantes y el Capítulo V: Tyche y automaton, repetición y
significante.
Tomando el concepto de
Repetición, y siguiendo a Lacan, la diferenciará del retorno, la rememoración,
el hábito, el comportamiento estereotipado… La repetición lacaniana es algo más
que la insistencia de significantes, que estaría dentro del orden de lo Simbólico,
nos hablará de la repetición lacaniana en su acepción de Real.
Toma el sueño que Lacan menciona en este
Seminario, paradigma del sueño de angustia en Freud, en el cual un padre sueña
que su hijo muerto lo toma por su brazo y le murmura en tono de reproche:
“Padre,¿ acaso no ves que ardo?”.
Lacan se pregunta: ya que el
deseo del sueño es seguir durmiendo ¿Qué es lo que despierta? Lo que despierta
es otra realidad, algo de otro orden,un más allá del principio de placer, un
abismo, un agujero que no se puede capturar hablando, algo del orden de lo
Real. Podríamos decir que el despertar del sueño, está en relación con la idea
de repetición en lo Real. Luego del despertar, en el mejor de los casos, la
realidad fantasmática se volverá a instalar para nuestra tranquilidad.
Nos recomendó varios textos y
autores: Bruce Fink, Maire Jaanus, Germán García… Con un estilo
descontracturado, pero sin perder su precisión teórica, Elena nos iluminó
cuestiones fundamentales de este Seminario, que enriquecieron la lectura que
hemos venido realizando lo largo de todo este año.